11.1.08

Abimael Guzmán, el hijo de puta

Por Sinestesio Jarama, crítico de trailers

Finalmente llegó a estrenarse esta semana el primer documental del joven director peruano Augusto Rocambol, quien ya antes gozara de éxitos de taquilla con películas de aplaudida originalidad como El joven manos de alicates, El laberinto del diablo y La guerra de los anillos.

En esta cinta, Rocambol arriesga una versión bastante novedosa, equilibrada y, por qué no decirlo, humana de Abimael Guzmán, llegando a la conclusión de que el también llamado “Presidente Gonzalo” no fue sino el monstruoso y demoniaco cabecilla de una banda terrorista.

Rocambol quiere explorar las raíces de la violencia en la gran trama social de nuestro país y para ello investiga sus antecedentes en la historia peruana que, según da a entender el documental, se remontan hasta el polémico Hombre de Caral, conocido por convertir en un asunto personal la menor discrepancia ideológica.

En su búsqueda de los momentos cruciales de la crisis peruana, el film repasa la conquista, las rebeliones indígenas, la independencia, la guerra con Chile, la salida del aire de Yola Polastri y la derrota de 5 a 1 contra Ecuador.

Empeñado en una comprensión total de los hechos, el documentalista no deja ningún cabo suelto e intenta huir con mucho afán y pies ligeros de los lugares comunes. De otra forma no se explican esas tomas de atardeceres en una playa con palmeras, gaviotas y daiquiris, las iglesias barrocas abundantes en palomas, los niños jugueteando y riendo en una plazuelita bajo el sol serrano, imágenes que dicen mucho de un cineasta audaz que quiere mostrar otra cara de la violencia. Una cara totalmente insólita, de hecho, que no se le habría ocurrido a nadie que en verdad conociera los hechos.

El logro final es lo que importa. Algunos críticos envidiosos de Internet han señalado confusiones históricas poco relevantes para el conjunto, como atribuir la ejecución de Túpac Amaru II a Diego de Almagro, señalar que la entrevista de Guayaquil se llevó a cabo en Quito entre Bolivar y Obelix, mencionar a José Carlos Mariátegui como fundador de la Trinchera Norte y confundir al congresista Mauricio Mulder con Machín, el personaje de Patacláun.

Que Abimael Guzmán haya nacido en Arequipa y no en Liverpool (¡qué tanto problema por unos cuantos kilómetros de diferencia!), que Sendero Luminoso sea una escisión de la izquierda peruana y no de los Traveling Wilburys, y que el dictador de Camboya se llamara Pol Pot y no Popol Vuh, tal como afirma Rocambol en este documental, son detalles menores frente al retrato honesto y descarnado que el cineasta nos ofrece, con una cámara ágil y veloz, nerviosa, que a ratos se mueve mucho y casi siempre está en foco.

Desafortunadamente, en sus últimos minutos, Abimael Guzmán, el hijo de puta abandona su propuesta equilibrada y toma partido. A pesar de todo, el documental es un trabajo que vale la pena ver para apoyar al cine nacional y por lo inusitado de su historia: es un relato compuesto con la libertad que sólo puede ser hija del desconocimiento, como debe ocurrir siempre con las bellas artes plásticas.

(En la foto, el líder de Sendero Luminoso alzando el puño equivocado en el documental Abimael Guzmán, el hijo de puta).

13 comentarios:

Anónimo dijo...

Me tinka que este post lo escribió Gary Legget

Rorschach dijo...

Estás cien por ciento equivocado, mi estimado anónimo.

Anónimo dijo...

Que Sinestesio -quien por cierto debería llamarse más apropiadamente Anestesio por razones obvias- es un improvisado como crítico de cine, lo muestra el hecho de no haber dado referencia o mención alguna de “La jubilosa erección del jubilado”, obra maestra de Rocambol, célebre por el batacazo que produjera al vencer por unanimidad del jurado en Cannes a “Clítoris feminista de mi hermana”, quitándole La Palma de Oro al repelente pero talentoso Pedro Almodóvar a quien todos daban por fijo ganador en las orgías previas a la premiación. Y si esto es en sí una grave omisión, lo que resulta de veras imperdonable es el silencio total acerca de las muy notables audacias fílmicas de Rocambol en su versión de ciertos poemas esotéricos de Héctor Larval; en efecto, en “Al oeste de la molécula” el cineasta supera en algunas secuencias lo más valioso que se conozca de la experimentación cinematográfica en cualquier cineclub del mundo. Qué va, hombre, Sinestesio no tiene nada de crítico, ignora demasiado (su “ingenio” acerca de “trailers” es una ocurrencia de viuda alegre escribiendo sus memorias; el hecho de que no la haya dejado pasar de largo, muestra su impotencia).
No estoy de acuerdo con la descripción de Abimael, como un criminal parido por una trabajadora del sexo. El hombre sólo buscaba la justicia para su pueblo y es un ser delicado, que escribe poemas y ama la filosofía, que bailaba con fruición la danza de Zorba el griego por pura sensibilidad exquisita ante el personaje de Bouboulina, la tierna y vieja puta (en su tiempo sí se podía decir puta sin que jodan las feministas de Lima con su fastidiosísimo “trabajadora del sexo”), descendiente de Anacreonte según la tesis heterodoxa, asesorada por Rorschach, de un joven greco-americano. La historia la escriben los vencedores y si bien no estoy seguro de que si hubiera ganado esa guerra Guzmán, estaríamos en el Perú mejor que ahora (algo muy fácil de lograr por lo demás ya que estamos hasta las huevas de jodidos en la actualidad, peor que Haití en Educación, por ejemplo) de algo sí estoy segurísimo: más de uno de los que yo conozco bien y no digo los nombres, estaría dedicándole poemas acomodaticios: liróforo celeste y todas esas vainas.
R. BARTHES

Julio Gómez dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Al leer las chifladuras que escribe, me pregunto quién es este lastimero payaso a quien su plúmbea y feminoide expresividad, pésimamente escrita por añadidura, le debe parecer quizás a él lo bastante buena como para “inspirarle” el innombrable tupé, de una ridiculez que excede todo límite, de tomar como seudónimo el de un notable pensador. Me lo imagino, autoengañándose con una pretendida “lucidez”, cual madrastra de Blancanieves ante su espejito, poseedor, sin duda, de una presencia de manifiesta insignificancia, que es lo que corresponde a un tipillo de sus indirectamente mostradas características.
Sobre su evidente militancia en Sendero Tenebroso, ¿podría alguien dudar de que esto era fácil y certeramente adivinable?. La Gran Combi debería cerrarle sus puertas a semejante espécimen de la subcultura.

Mr.Kike dijo...

No he parado de reirme al leer tu post.

=)

Anónimo dijo...

Idem que KIKE. Pero también me han hecho reír R. Barthes y su vitriólico atacante.

Anónimo dijo...

Me sorprendió a mares vastos, que Sinestesio no haga referencia al minuto 53 del documental, cuando Gamaniel Guzmán levanta un X-Wing solo con su mente. ¿Ficción? ¿Efecto de cámaras?

No hay nada que hacer, Rocambol (también conocido por los que saben de cartas como Tresillo), es nuestro Michael Moore. Por lo pronto, su panza va creciendo de tanto ágape al que lo invitan.

Anónimo dijo...

No creo que a Michael Moore le agrade esa necia comparación con el torpe Sinestesio que
Skywalker, vagabundeando por las nubes de su ineptitud, dispara con obsecuencia de plástico taiwanés e irresponsabilidad de chamán con taparrabos. Que le crezca la panza con la complacida digestión de las continuas comilonas que la memez imperante en los medios culturosos le brinda, no da a nadie razón valedera para comparar a Sinestesio con Moore. Igual nivel de estupidez yo mostraría al decir entonces que Sinestesio es un Charles Laughton, o un Marlon Brando, basándome para ello tan solo en el perímetro que circunda su abdomen y alguna veleidad de actor que debe haber tenido en alguna ocasión.

R. BARTHES, ex-cobrador de combi.

Anónimo dijo...

PARA NO PUBLICAR.- (si tuviera tu dirección, Rorschach,te escribiría esto aparte).Parecería que mi cuarto mensaje lo vas a excluir.No importa pero en tal caso no habrá un quinto.Fíjate que sin mí,tuvieras en este post sólo 4 mensajes.¿Acaso has creído que en efecto creo que Rorschach-Sinestesio es un torpe? No hombre,sólo quería contribuir,"dinamizar" el diálogo,que anda algo estático (en particular soy también 10:15 AM aunque no lo creas). Suerte.Un abrazo.R.B.

Rorschach dijo...

R.B.:

Rorschach consulta su correo cuando puede. No hay que apurarse. Y últimamente no anda inspirado.

Anónimo dijo...

"Fíjate que sin mí,tuvieras en este post sólo 4 mensajes"

RB: Comentar en un blog, ¿es hacerle un favor a alguien?
A parte: en este caso se dice "tendrías", no "tuvieras".

Anónimo dijo...

Sé feliz y muere en paz,primo.